La integración sensorial es un proceso por el cual el cerebro recibe, procesa y organiza la información sensorial que recibe de nuestro entorno. Para algunos niños, incluyendo algunos niños en el espectro autista, este proceso puede ser un poco más difícil, lo que puede resultar en problemas de comportamiento y/o de aprendizaje. Afortunadamente, existen varias actividades que puedes hacer en casa para ayudar a tu hijo a mejorar su integración sensorial. Aquí te dejo algunas:

1. Juego de Texturas

A los niños les encanta experimentar con diferentes texturas. Puedes llenar una caja con diferentes objetos de diferentes texturas (como arroz, arena, algodón, etc.) y pedirle a tu hijo que los toque y los explore.

2. Juego de Equilibrio

Los juegos de equilibrio pueden ayudar a mejorar la coordinación y el equilibrio de tu hijo. Puedes hacer una línea en el suelo con cinta adhesiva y pedirle a tu hijo que camine sobre ella sin salirse. También puedes hacer que camine sobre objetos más pequeños y/o inestables (como almohadas o pelotas) para aumentar el desafío.

3. Juego de Estimulación Vestibular

La estimulación vestibular es una técnica que implica mover el cuerpo para estimular el sistema vestibular del oído interno. Los juegos como columpiarse, saltar en un trampolín, rodar por el suelo o hacer la rueda son excelentes formas de proporcionar estimulación vestibular.

4. Juego de estimulación Propioceptiva

La propiocepción se refiere a la capacidad del cerebro para percibir la posición y el movimiento del cuerpo. Los juegos como hacer flexiones, saltar la cuerda o hacer ejercicios de resistencia son excelentes formas de proporcionar estimulación propioceptiva.

5. Juego de Estimulación Táctil

La estimulación táctil puede ayudar a mejorar la discriminación táctil y la percepción del cuerpo. Los juegos como hacer masajes, jugar con plastilina o hacer manualidades son excelentes formas de proporcionar estimulación táctil.

6. Juego de Estimulación Visual

La estimulación visual puede ayudar a mejorar la percepción visual y la coordinación mano-ojo. Los juegos como hacer rompecabezas, jugar al baloncesto o dibujar son excelentes formas de proporcionar estimulación visual.

Es importante recordar que cada niño es único y puede tener diferentes necesidades de integración sensorial. Si estás preocupado acerca de la capacidad de tu hijo para procesar la información sensorial, es importante hablar con un profesional de la salud para obtener asesoramiento y orientación. Date tiempo de experimentar estas actividades y seguir ayudando a tus hijos en su desarrollo